Historia de Selle-ette ...

Cuando Sandrine se puso en contacto con nosotros en otoño de 2022, fue para que hiciéramos algunas reparaciones en la Kruyer III  que había estado utilizando durante dos años en su vuelta al mundo en plan  "0 emisiones de carbono". Buscaba apoyo para poder llevar a cabo su proyecto, así que nos reunimos y acordamos asociarnos. La historia entre las Kruyer(I, II y III) y las vueltas al mundo "0 carbono" es ya larga (*), y no parece que vaya a detenerse.

A continuación, es Sandrine quien toma la palabra...

(*) Para que conste, la Kruyer I se desarrolló en colaboración con Olivier PEYRE durante la vuelta al mundo que empezó a dar en 2008.

Orientación oeste, magnífico cielo sobre el Catray y el despegue de Champfromier

Olivier Peyre y yo nos vimos por primera vez en noviembre para hablar de acrobacia, mar y cicloturismo.

Cuando dos pilotos trotamundos se encuentran, hablar de sillas de vuelo no es causalidad. 

Todo empezó mucho antes de mi vuelta al mundo, tras un magnífico vuelo peinando los cortados de Saint-Hilaire, mientras charlaba con Didier, que llevaba entonces la tienda que hay en el aterrizaje de Lumbin. Mi rutina consistía en pasearme por la librería de vuelo libre desde la que Didier me había reequipado a precio de ganga, cuando regresé (sin un duro) de mis tres años de expatriada en Nueva Zelanda.

Mi mirada se detuvo en una imagen alucinante del Salar de Uyuni, en la que se veía a un barbudo sobre el sillín de una bicicleta de la que tiraba una vela bien inflada. Era la historia de la vuelta al mundo deOlivier Peyre, plasmada en su libro En Route Avec Aile. Me dije, en un destello de lucidez: ¡este tronco sí que sabe! Devoré sus páginas mientras trabajaba duro en mi doctorado entre Chambéry y Ushuaïa, soñando durante mucho tiempo con una vuelta al mundo en bicicleta y vela-stop. Pero por otra parte, cargar en una bicicleta con mis doce kilos de material de vuelo no me entusiasmaba demasiado.

Y, sin embargo, desde hace dos años llevo viajando con una vela monocapa y una silla ultraligera, la Kortel Kruyer III, en la alforja de mi bicicleta, unos 35.000 km, es decir, la mitad de la vuelta a la Tierra. En 2022, mientras estaba en Australia, tuve que regresar a Francia para acompañar a mi padre que estaba con problemas de salud.

El equipo Kortel me cuenta que mi epopeya ultraligera tiene una historia más grande detrás, que parte de la propia concepción de la Kruyer III (en su primera versión) gracias a un tal ¡Olivier Peyre!

Y en un visto y no visto, con Kortel Design de intermediario, aquí estoy, frente a este permanentemente barbudo, intercambiando nuestras anécdotas más exageradas de hacer autostop a barcos, de gentes a quien habríamos tirado con gusto por la borda, de despegues acrobáticos en las cuatro esquinas del mundo, de los lugares mágicos donde nos habría gustado quedarnos, mientras sobre los mapas de Australia y Nepal señalábamos con los dedos nuestras trayectorias y nuestros sueños. Escucho atentamente sus montones de consejos, especialmente sobre sus intentos de hacer kite-bike. Por la expresión de su rostro, sé que comprende perfectamente la belleza y las dificultades inherentes a un viaje tan largo. El lleva 7 años en ruta, y yo 2. Olivier y yo habríamos necesitado semanas para contarnos todo lo que queríamos. Estimulada por la experiencia que me ha transmitido, ahora que estoy de vuelta en Australia, tengo presente su mantra: "Nunca pierdas de vista el objetivo y avanza". Estoy impaciente por partir hacia Darwin.

Para conocer las últimas noticias sobre mi viaje en parapente, bicicleta y vela-stop, que en inglés se dice llamado Wing Tour, actualmente estoy preparando la travesía del interior de Australia. Puedes seguirme en mi página web awingtour.com. Allí encontrarás los relatos, vídeos, fotos y acuarelas de una vuelta a medio mundo que me llevó al cielo del desierto mexicano, a volar cerca del Del Fuego en erupción, en Guatemala, a las térmicas insulares de Bora Bora. Tengo una presencia discreta en las redes, pues estoy más "conectada" al momento presente, pero puedes seguirme en Instagram y Facebook hasta la etapa más importante de mi proyecto: el Himalaya a través del Langtang.

Más información sobre la aventura de Sandrine en su página web awingtour.com

Un día, estando yo consagrado a mis ocupaciones de ciclista jubilado (es decir, lo más alejado posible de la bicicleta -incluida la preparación minuciosa de una expedición a Marruecos en parapente y autostop o el intento de averiguar cómo instalar correctamente un paracaídas en la Kolibrí...), Guillaume me llamó y me dijo: "Tienes que quedar con alguien". 

En aquel momento no podía creer que una persona más en este mundo hubiera tenido la loca idea de combinar bicicleta, parapente y velero-stop para un largo viaje. Sin embargo, al día siguiente llegó Sandrine, toda melindrosa, a contarme su historia. Claro, ella ha tenido la buena idea de llevar una bicicleta cómoda y optar por una reclinada, una vela monocapa y una silla  Kruyer III, pero por lo demás la historia es más o menos la misma una y otra vez¡!

En la vorágine de intercambios que siguieron -teníamos tanto que contarnos- ella volvió a hacer brillar a todas las lentejuelas que parecían dormidas en el fondo de mi cabeza, donde guardamos lo que nos construyó, aunque no seamos demasiado conscientes de su existencia. Me habló de sus contratiempos en los veleros, de la gran tenacidad necesaria para afrontar las rectas infinitas, de esa pasión obstinada también que hay que mantener sin falta para hacer algunos vuelos a pesar de la fatiga del pedaleo. Su entusiasmo ha iluminado de pronto viejos sueños. ¡Me entraron ganas de nuevo!

El proyecto En route avec Aile  pasa de discípulo a discípulo. El proyecto Kruyer podríamos decir en Kortel. Así que buena suerte, ¡y nunca te rindas!

Olivier PEYRE

Aventurero trotamundos y embajador de Kortel Design